¿Son los mayores de 65 años un peligro al volante? Esta creencia popular es totalmente falsa, según ha podido demostrar un estudio presentado por la Fundación Línea Directa y realizado en colaboración con FESVIAL y Centro Zaragoza.
El estudio muestra la tajante postura de los conductores frente a esta creencia: 2,8 millones prohibirían la conducción nocturna a este grupo de mayores de 65 años y 860.000 conductores son partidarios de retirar el carné a los 65 años.
La realidad de los mayores de 65 años en carretera
Los datos recogidos por el estudio entre 2009 y 2014 muestra que los conductores mayores de 65 años registran cuatro veces menos accidentalidad que los menores de 25 años y menos de la mitad que los conductores de 35 a 44 años.
Además, este grupo de conductores no son agresivos en la conducción, aceptan mucho mejor sus limitaciones y respetan más los límites de velocidad. Por el contrario, su mayor debilidad física les propicia una mayor tasa de mortalidad y lesiones graves en accidentes de tráfico. Respecto a los peatones muertos, representan más de la mitad.
Según un artículo divulgado por la revista de la Sociedad Americana de Geriatría, las personas con demencia tienen una probabilidad de dos a ocho veces mayor de causar un accidente de tráfico que los adultos sin demencia.
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